Bucarest es la capital de Rumanía y, por lo tanto, una de las ciudades más visitadas del país. Hasta dos millones de turistas recorren sus calles cada año para apreciar de primera mano una combinación casi única de historia y modernidad.
Déjate conquistar por la inmensidad de su arquitectura, de su historia y por la cantidad de espacios culturales en los que encontrarás decenas de formas de pasar tu tiempo libre mientras descubres la ciudad.
Para encontrar la primera mención histórica con el nombre contemporáneo hay que viajar hasta el año 1459. Un resumen bastante esquemático de su curso histórico podría resumirse bajo los siguientes acontecimientos claves: el vasallaje del Imperio Otomano, los periodos de ocupación rusa y los periodos discontinuos de dominación de los Habsburgo.
Fue en 1881, tras la unificación de Moldavia con el País Rumano (Tara Romaneasca), cuando Bucarest se convierte en la capital de los principados rumanos. Posteriormente, el 1 de diciembre de 1918 se transforma en la capital de todo el país, una vez consumada la unificación de Transilvania con Rumanía. Durante el periodo de entreguerras, la ciudad aprovechó para desarrollarse cultural y administrativamente, hasta tal punto de que fue conocida como «Little Paris» (Pequeño París).
Otra clave histórica llegó en el tiempo transcurrido entre el final de la Segunda Guerra Mundial y la revolución de 1989; en esos años Rumanía estuvo en manos del régimen comunista, un periodo en el que Bucarest cambió su cara de forma radical.
Bucarest se ubica al sureste de Rumanía, limitando por el norte con Ploiesti (norte), Giurgiu (sur), Dobrogea (este) y Oltenia (oeste). La capital se encuentra en la conocida como Llanura Vlăsiei (Câmpia Vlăsiei), que es una parte integral de la Llanura Rumana (Câmpia Română).
Tras el Pentágono (EE UU), es el edificio administrativo más grande del mundo. Fue construido conforme a la arquitectura del realismo socialista y su construcción se inició en 1984 y finalizó en 1997 (aunque todavía hay zonas que están en construcción). Está repartido en 23 zonas y hoy en día alberga tanto el Parlamento de Rumanía como la Camara de los Diputados.
En total tiene 1.100 habitaciones (solo 400 están siendo utilizadas), 8 niveles subterráneos (el último siendo un bunker nuclear que comunica con otras zonas a través de 20 kilómetros de catacumbas) y su valor está estimado en 3 mil millones de euros.
Es uno de los edificios más emblemáticos de Bucarest. Se construyó entre 1886 y 1888 combinando magistralmente los estilos neoclásico y ecléctico. Desde 2004, el Ateneo Rumano está en la Lista de los Monumentos Históricos, siendo considerado uno de los edificios más valiosos, con un elevado valor nacional y universal.
Se trata de uno de los monumentos con más significado para el pueblo rumano. Ubicado en el norte de Bucarest, este monumento tiene 27 metros de altura y es todo un símbolo relacionado con la victoria de Rumanía en la Primera Guerra Mundial.
Actualmente, el Arco de Triunfo alberga un pequeño museo que puede visitarse solo en ocasiones especiales.
Aquí es donde encontrarás representadas las tradiciones más populares y la riqueza artística nacional. Tienes que saber que este es el segundo museo al aire libre más grande de Rumanía (el mas grande es el Museo Astra, ubicado en la ciudad de Sibiu).
Su visita es obligatoria para entender mejor la vida rural de Rumanía hace años atrás. Encontrarás casas tradicionales de todas las regiones de Rumanía y podrás saborear la tranquilidad de pasear casi como por un pueblo, pero en el corazón de Bucarest.
Es el museo más grande de estas características en Rumanía. En su interior alberga más de dos millones de especies de vertebrados e invertebrados divididos en varias categorías (zoología, paleontología, mineralogía, etnografía, etc.)
La primera versión de este museo data en el año 1834 y, tras varios cambios de formato e ubicación, en 2011 se abrió de nuevo, tras 3 años de renovaciones. Está ubicado en la Avenida Kiseleff nº1 y el precio de un billete para adultos es de 20 lei (aprox. 4€) y de 5 lei para niños, estudiantes y jubilados.
Como te podías esperar, en el centro histórico de Bucarest encontrarás multitud de atracciones turísticas de toda clase. La lista es extensa: el monasterio Stavropoleus, Caru` cu Bere, el palacio CEC, la estatua de Traian o Curtea Domnească.
Te animamos a que busques la calle Lipscani y te pierdas por la zona. ¡Rebosa de bares y restaurantes, para que nunca te falte algo que hacer!
Bucarest tiene conexiones directas con la mayoría de las capitales europeas y con las ciudades más grandes de Rumanía.
Posee dos aeropuertos: el aeropuerto Henri Coanda (Otopeni) y el Aurel Vlaicu. Para viajar cómodamente por el interior del país, en el primero de ellos encontrarás vuelos nacionales a Arad, Bacău, Baia Mare, Cluj-Napoca, Constanța, Iași, Satu Mare, Suceava, Târgu Mureș y Timișoara.
En cuanto a vuelos internacionales es posible viajar a Chisinau (República de Moldavia), y a otros aeropuertos de Europa, América del Norte, Asia y África. Las aerolíneas low cost, por su parte, se concentran en el aeropuerto Aurel Vlaicu, donde operan tanto vuelos nacionales como internacionales.
Si eres de los que van a viajar con coche de alquiler por Rumanía, esta información puede ser de bastante utilidad:
Bucarest, al ser la capital de Rumanía, representa el centro de comunicaciones por carretera más importante del país. De hecho, es el punto de partida de todas las carreteras y autopistas nacionales. Te presentamos a continuación las carreteras más importantes para moverte en coche por Rumanía, en función de tu destino:
Además la DN1A (Bucarest – Ploiești – Vălenii de Munte – Brașov) y la DN17 (Bucarest – Târgoviște – Sinaia) son otras dos carreteras nacionales que también parten desde la capital.
Si prefieres viajar en tren a través de Rumanía, desde Bucarest también parten las líneas de CFR (el operador ferroviario del país) que, además de llegar a las ciudades principales, conectan con muchos pueblos y zonas rurales. Si quieres viajar en tren, te recomendamos que mires bien los horarios ya que aquí el tren es bastante lento. Para rutas más cortas es recomendable pero si quieres viajar a Cluj Napoca (por ejemplo), puedes tardar hasta 12 horas en llegar.
No obstante, la opción más rápida para viajar (sin contar el coche o el avión, claro) es el autobús y el minibús. Aquí encontrarás toda la información necesaria para ello: autobuses y estaciones, salidas y llegadas, así como destinos, horarios y precios.
Si te apasionan los festivales, ven a Rumanía. Independientemente del estilo de música que prefieras, estamos convencidos de que aquí encontrarás uno hecho a la medida de tus gustos. Te dejamos aquí algunos de los festivales de música de Bucarest, pero tienes que saber que hay otros más grandes, en otras ciudades de Rumanía.
¿A qué estás esperando? Ven y disfruta de la música, los paisajes y las historias de un país que combina mágicamente modernidad y tradición.