En la mente de aquellos que la conocen, la palabra Brasov genera imágenes de fortificaciones medievales, paisajes pintorescos, edificios históricos o calles empedradas. Conocida en el pasado como la «Ciudad de la Corona», una vez que pises su puerta de entrada te darás cuenta de que el título sigue vigente hoy en día. Brasov se ha convertido en una de esas ciudades en las que historia y contemporaneidad conviven en perfecta armonía, ofreciendo al visitante experiencias y recuerdos inolvidables. Para que tú también la puedas disfrutar al máximo, esta es una lista de las atracciones turísticas que no deberías perderte en la ciudad.
La iglesia negra
Se trata de la iglesia de estilo gótico más grande del sudeste de Europa. Su construcción se alargó 100 años y el nombre proviene de un evento algo desafortunado: en 1689 la ciudad se vio envuelta en un fuego despiadado que terminó por oscurecer las paredes de la iglesia. En este lugar de culto encontrarás verdaderas joyas como las alfombras de Anatolia de los siglos XVII y XVIII, uno de los órganos más grandes del sudeste de Europa, o el calificado como uno de los altares góticos más bellos de Transilvania.
Plaza del Consejo
Está en pleno centro de la ciudad. Una zona que todavía es comparable a los tiempos en los que el comercio florecía por aquí, con ferias que aprovechaban los comerciantes rumanos para exhibir y vender sus productos. Verás que la plaza está rodeada de las paredes de la antigua fortaleza y de muchos edificios que le confieren un aire muy medieval. ¿Algunos ejemplos? El antiguo edificio del Ayuntamiento, de la Casa del Consejo, la Casa de los Comerciantes o la Catedral de la Asunción.
Strada Sforii (Calle de la Cuerda)
Esta calle forma parte del listado de las más estrechas de Europa, un lugar perfecto para tomar algunas fotos que serán la envidia de tus amigos. En sus orígenes, el callejón estaba destinado a ser un corredor para los bomberos, una finalidad que, lógicamente, ya no tiene hoy en día.
Tâmpa
El monte Tâmpa se encuentra en pleno corazón de Brasov, siendo además el punto más alto de la ciudad con sus 960 metros. Puedes optar por subir a pie o en teleférico para disfrutar de una vista única de la ciudad.
La fortaleza de Brașov
Aquí tienes una cita imprescindible. La fortaleza de Brașov está rodeada de bosque y puedes llegar tanto en coche como a pie. Disfruta de los muros únicos de la fortaleza, que dan testimonio de historias de nada menos que 6 siglos de antigüedad. ¡Te prometemos que la vista desde aquí es inolvidable!
Plaza de la Unión
La plaza Unirii es el centro histórico de la ciudad y por lo tanto debería estar en la lista de visitas de cualquier turista. En el pasado, debido a los guijarros que llegaban con las aguas que fluían desde las piedras de Salomón, se le conocía como «Piata Prundului».
Hoy en día, la plaza alberga edificios históricos como el Museo de la Primera Escuela Rumana, la Iglesia de San Nicolás o la estatua del Diácono Coresi, que publicó los primeros libros impresos en rumano.
Palacio de Justicia
Este edificio fue construido entre 1900 y 1902 siguiendo las enseñanzas del estilo arquitectónico francés ecléctico. Actualmente es la sede del Tribunal de Apelación, de la Prefectura y del Consejo del Condado. El Palacio de Justicia es un imponente edificio que podrás visitar en el Bulevar de los Héroes nº 5.
Museo de Arte
Este museo está ubicado en un edificio emblemático, representativo del estilo neobarroco. En su interior encontrarás una galería nacional con valiosas pinturas, esculturas y diferentes elementos de arte decorativo. Además, con bastante frecuencia alberga exposiciones a través de las cuales se presentan al público en general obras maestras tanto nacionales como internacionales. Para visitarlo tendrás que desplazarte hasta el Bulevar de los Héroes nº 21.
Sinagoga Neologica
Esta sinagoga ha adquirido el título de monumento histórico y todavía sirve a la comunidad judía de Brasov. Se construyó entre 1899 y 1901 y es representativo del estilo arquitectónico neogótico, aunque lo combina con algunos elementos típicos árabes. Visítala en la calle Poarta Șchei nº 29.
Sinagoga ortodoxa
Ubicada en la calle del Castillo (concretamente en el nº 64), encontrarás este otro lugar de culto judío. Está incluido en la lista de puntos turísticos imprescindibles por su impresionante arquitectura. Se levantó en según el estilo ecléctico en 1924 y su fachada está decorada con mosaicos de cerámica en los que hay elementos vegetales y dos leones.